Se generaron altísimas expectativas entre las víctimas del terrorismo cuando el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón admitió a trámite en febrero de 2022 una querella de Dignidad y Justicia que pretendía sentar en el banquillo a la cúpula de ETA en la época del secuestro y asesinato del concejal del PPen Ermua Miguel Ángel Blanco . Quizá ahí empezó el problema. Tenía su sentido. En una organización terrorista fuertemente jerarquizada quienes ostentaban el poder tuvieron que autorizar 48 horas de chantaje al Estado pistola en mano y pudieron impedir el desenlace. Ya en aquel momento había dudas