La convivencia entre el sector del taxi y los vehículos con conductor (VTC) en Galicia está siendo de todo menos cordial. El desembarco en las ciudades de La Coruña y Santiago de la empresa Cabify está disparando la tensión entre los taxistas y los conductores de unos vehículos que, reprochan, «se saltan todas las normas». La crítica radica, según explica a ABC el presidente de la Asociación de Taxis de la capital gallega, Jesús García, en que una parte de los jugadores están cumpliendo las reglas, pero la otra no. « Están haciendo servicios que la ley no les permite , como los viajes dentro del mismo término municipal, que ellos tienen prohibidos» introduce el profesional para explicar que uno de estos vehículos puede recoger a un viajero en el aeropuerto «y llevarlo a Ames o a Orense, pero no al centro de la ciudad» especifica. «Y eso —asegura— ocurre continuamente». Una fotografía similar se da en la ciudad herculina, donde el desembarco de esta empresa se produjo antes que en Santiago —seis años atrás— generando unas tensiones que se mantienen a día de hoy. Desde la Unión de Taxis Galegos son claros y exponen que «la norma es la que es», pero las quejas por la competencia que se desata a pie de asfalto continúan. Una de las más comunes es el momento de la captación del cliente. En este caso, taxistas coruñeses avisan de que los VTC trabajan bajo petición y no pueden captar a los viajeros en ruta ni salir a buscarlos , algo que, afean, sí se hace. A su favor tienen pruebas gráficas que ya en su día presentaron ante la Xunta y el ayuntamiento herculino. La misma técnica están empleando los taxistas compostelanos, donde Cabify lleva apenas tres meses operando . Y con la novedad, llegaron los problemas. El portavoz de la asociación de taxis de la capital explica que le han pedido a sus socios que graben todas las ilegalidades con las que se encuentren, para notificárselas al concello, remarcando, eso sí, que en ningún caso se enfrenten a estos conductores. «Nosotros no podemos entrar en una recriminación, mucho menos delante de los clientes, y nos limitamos a recabar pruebas gráficas » aseguran. Sin embargo, las escenas que prueban estas desavenencias se acabaron produciendo. Hace una semana, revelan desde la Asociación de Taxistas de Santiago, se produjo una persecución por parte de un VTC a un taxi que en ese momento llevaba a un cliente montado. «Lo siguieron por las calles de Santiago hasta el lugar de destino, aún sabiendo que son ellos los que lo están haciendo mal» indican. A estos encontronazos se suma la falta de agentes locales, que dificulta el control de la normativa por parte de las VTC. «Están cogiendo a algunos, pero es un mínimo de lo que nosotros vemos a diario» se quejan. Consultados por ABC, desde el concello de la ciudad explican que en estos momentos hay sobre la mesa diez propuestas de sanción : 7 infracciones detectadas por el propio consistorio y tres por la Xunta, aunque posteriormente las transfiere al ayuntamiento para que éste las tramite. Todas ellas tienen que ver con la falta de autorización habilitante para realizar servicios urbanos, precisamente, el punto de fricción en el más hincapié hace el gremio de taxistas. En este aspecto, desde Raxoi inciden en que la realización de un servicio urbano de VTC sin la preceptiva autorización se considerará una infracción de carácter «muy grave» y la multa aparejada va desde los 2.001 euros hasta los 6.000 , con la posibilidad de declarar la caducidad del título administrativo habilitante. Sobre el tira y afloja entre uno y otro servicio, las fuentes consultadas explican que «son conscientes de la carencia de taxis en Santiago», aunque señalan que este «déficit no puede ser cubierto por VTC». Para paliar un problema que los usuarios llevan tiempo denunciando, y que complica de forma llamativa los traslados en la capital gallega, el ayuntamiento liderado por la nacionalista Goretti Sanmartín se remonta al 1998 para justificar que desde ese año no se otorgaron nuevas licencias. « Hoy tenemos menos taxis operativos que hace diez años , pese a tener 4.000 habitantes más y una presión turística mucho mayor: 200.000 peregrinos más que hace una década y 1,5 millones de pasajeros más en Lavacolla». También escaló, contabilizan, el número de servicios de RadioTaxi, que pasaron de 212.000 en 2016 a más de 360.000 en 2022. En estos datos se basó la creación de 29 nuevas licencias que en estos momentos se están tramitando y que cuentan con el aval de la Xunta, a unos precios que al sector del taxi le parecen abusivos. «Según los presupuesto municipales, parece que cada licencia se va a ir a 100.000 euros cuando antes eran de 3.000… a ver si no les queda alguna colgada » dudan. Con el arranque de la temporada alta a la vuelta de la esquina, los taxistas compostelanos lamentan que «hace semanas» que ya se empiezan a ver por la ciudad circulando VTC «que no pertenecen a Santiago», pese a que en números globales ya superan al número total de taxis: 157 frente a 144. «Lo mismo que pedimos que se nos controle a nosotros, exigimos que se los vigile a ellos» , reclaman con el objetivo último de rebajar tensiones y dar el mejor servicio a los clientes.
Source link : https://www.abc.es/espana/galicia/persecuciones-denuncias-sanciones-taxistas-santiagueses-vtc-20250324182452-nt.html
Author : (abc)
Publish date : 2025-03-24 09:23:00
Copyright for syndicated content belongs to the linked Source.
Persecuciones, denuncias y sanciones entre taxistas santiagueses y los VTC
Previous ArticleCondenado a prisión permanente revisable por asesinar a su hija de 11 meses y a su pareja en Cantabria
Next Article USA-Einreise: Warum Deutsche oft festgehalten werden