Cuando comemos no solo estamos proporcionando a nuestro organismo los nutrientes necesarios para realizar las funciones vitales día a día, sino que también puede suponer un disfrute para nuestro paladar. Siendo el gusto por unos sabores u otros algo muy personal, existen alimentos y preparaciones que preferimos antes que otras porque nos resultan más agradables y ricas en boca y olfato. Así, una de los ingredientes que suelen hacer que la comida esté más sabrosa es la sal . Este condimento también se utiliza como conservante, para deshidratar alimentos, para enmascarar sabores desagradables o para facilitar la retención de agua, según indica la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición . Esta misma fuente afirma que, aunque el sodio que aporta la sal es indispensable para la vida, también «parece tener un efecto perjudicial para la salud si se consume en exceso . La sal debe controlarse porque un consumo excesivo afecta negativamente a la presión arterial y ésta provoca enfermedad cardiovascular (infartos cerebrales, infatos cardiacos)». La Organización Mundial de la Salud (OMS) por su parte, indica que la ingesta recomendada para los adultos se indica que sea inferior a 2000 mg al día, lo cual equivale a menos de 5 gramos diarios de sal, «poco menos de una cucharadita». Además, especifican que «toda la sal que se consume debería ser sal yodada (fortificada con yodo), algo esencial para el desarrollo saludable del cerebro del feto y del niño de corta edad y para optimizar las funciones mentales de las personas en general». En este sentido, una farmacéutica llamada Helena Rodero que divulga contenido sobre salud en redes sociales, también ha compartido información que puede resultar de interés sobre la sal. En su caso concreto se dirige a las personas que toman sal del Himalaya, ya que, según explica, no está yodada: « Es cara y no aporta nada diferente a una sal cualquiera. Además no está yodada », compartía en una publicación de Instagram. «En España somos deficitarios de yodo, la sal del Himalaya no tiene apenas yodo, por eso se aconseja tomar sal yodada. Para asegurarnos de cubrir las necesidades de yodo y, por lo tanto, que nuestra glándula tiroides funcione adecuadamente . Si estás conumiendo sal del HImalaya probablemente no estés llegando a esas necesidades de yodo y pueda suponerte un problema con tu tiroides y tener bocio o hipotiroidismo por déficit de yodo », explica la farmacéutica. Del mismo modo, la profesional acompaña el vídeo con un texto en el que explica que esta recomendación es a nivel general, ya que cada caso particular debe tratarse con un médico : «La recomendación de consumo de sal yodada viene de la OMS y para evitar deficiencia poblacional debería consumirla el 90% de la población, y actualmente la está consumiendo sólo 40% aprox . No ha habido inversión en campañas informativas y no se está consumiendo lo necesario para evitar algo que es fácilmente evitable: hipotiroidismo por déficit de yodo», se puede leer.
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Author : (abc)
Publish date : 2025-03-15 10:30:00
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Una farmacéutica explica por qué no deberías tomar sal del Himalaya: «En España somos…»
